Corre , corre, corre, que te van a echar el
guante
Era el lema de una canción de
los míticos Leño encabezados por Rosendo que tantas noches de gloria dio a los
garitos hace años. Mira tú por dónde acaba de regresar a la actualidad y parece ser que la han adoptado desde la
DGT. Según el último globo sonda lanzado a los medios, podrán ser multados los
peatones que excedan los límites de velocidad. Así, tan tranquilos, tan panchos
se han quedado. Y entonces empiezo a elucubrar sobre los posibles radares a colocar
en las aceras para mayor control de los excesos. Luego vendrán los juegos de
luces de alta gama con las que iluminarnos a falta de luz solar suficiente.
Obviamente, cargaremos sobre nuestras muñecas unos intermitentes que indicarán
el cambio de trayectoria traidor para evitar colisiones. No faltarán sesudas
revisiones de nuestras suelas en las inspecciones técnicas a las que habremos
de asistir obligatoriamente. Por supuesto que el control de carga obligará a
espaciar las compras para no sobrepasar el nivel de seguridad exigible. Y todo
esto añadido a la supresión de cualquier carrera popular que no haría más que
acrecentar el peligro de colisiones. Estas carreras pasarán a formar parte de las
competiciones a desarrollar sobre un circuito convenientemente acondicionado.
Queda clara la responsabilidad absoluta del adulto a quien se le haya escapado
el niño en su natural intento de correr libre por las aceras. Las penas están
por determinar, pero seguro que quedarán suficientemente claras para el general
conocimiento de estos émulos de Filípides que se empeñan en desgastar los
asfaltos como ya dijera Gila. No creo, en mi más absoluta inocencia, que les
mueva el ánimo recaudatorio a estas mentes pensante, no, no lo creo. Quieren velar
por la compostura general y la corrección del tránsito. Y hacen bien, según los criterios tutoriales
en los que se apoyan. Ellos, que a buen seguro disfrutaron de charlas
conciliadoras en colegios mayores, lo hacen por nuestro bien. Aquellos que
fuimos asiduos a antros de poca luz y fuertes decibelios, no somos conscientes
del peligro que suponemos cuando caminamos sin control. Y eso no puede ser, no
señor. Sólo les falta habilitar alcoholímetros para detectar si el vino de la
comida era peleón o de buen paladar. En cualquier caso, el índice será
suficiente para cargar con la receta firmada que no admitirá reclamo. Por
cierto, esto implicará un carnet de peatón, ¿no? ¿A qué edad se podrán apuntar
a las peatonescuelas? ¿Cuántos puntos se
otorgarán nada más obtenerlo? En fin, me callo ya. Voy a revisar mis suelas
porque esta mañana he resbalado un poco y creo que no cumplen con la norma.
¿Alguien conoce de algún zapatero que cumpla las normas y tenga horario
flexible? Agradecería que me lo comunicaseis antes de que entre la norma y pague
la multa. Aunque en mi caso, os lo aseguro, sería por lento.
Jesús (http://defrijan.bubok.es)
No hay comentarios:
Publicar un comentario